A pesar de la nota de protesta enviada recientemente por La Moneda, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, redobló este martes sus ataques contra el mandatario electo de Chile, José Antonio Kast. A través de su cuenta en la red social X, el líder colombiano lanzó una serie de descalificaciones de alto calibre, calificando el triunfo del republicano como la llegada del «fascismo puro y simple» a Latinoamérica.
Petro, al compartir una imagen de Kast junto al presidente argentino Javier Milei, afirmó que ambos representan a una «extrema derecha» que no escatima en desatar «genocidios». En sus mensajes, el mandatario colombiano fue más allá al tildar a los líderes del Cono Sur de «nazis» y «franquistas», acusándolos de utilizar el miedo y la mentira como métodos políticos inspirados en Joseph Goebbels, el jefe de propaganda del régimen nazi.
El mensaje de Petro incluyó graves acusaciones de violencia, sosteniendo que estos sectores «colocan bombas ellos mismos» con la supuesta ayuda de narcotraficantes. Además, atribuyó a esta corriente política la responsabilidad de «700.000 muertos asesinados» tanto en Chile como en Colombia, una cifra que generó inmediato estupor en los círculos diplomáticos por su falta de sustento estadístico histórico.
CRITICA EL PROCESO CONSTITUYENTE CHILENO
Junto con los ataques personales, el presidente de Colombia realizó un análisis sobre las causas de la derrota del progresismo en Chile. Según Petro, el resultado del domingo no fue solo una derrota electoral, sino un «fracaso» político derivado de la incapacidad de Chile para reemplazar la actual Constitución por una de carácter progresista y por la falta de profundidad en las reformas sociales. «Es un fracaso del que hay que aprender», sentenció.
Esta nueva arremetida de Petro profundiza la tensión diplomática entre Santiago y Bogotá, en un momento en que el Gobierno de Gabriel Boric intenta llevar adelante una transición republicana y ordenada. La insistencia de Petro en intervenir en los asuntos internos de Chile, pese a las quejas formales de la Cancillería chilena, proyecta un escenario de aislamiento para la futura administración de Kast respecto al eje Bogotá-Caracas.
Hasta el momento, el equipo del presidente electo ha optado por no responder directamente a los nuevos agravios de Petro, mientras que en la Cancillería chilena se evalúan nuevas medidas diplomáticas ante lo que consideran una violación reiterada a los principios de no injerencia entre Estados soberanos. (NP-Gemini-Emol)
