El gobernante de Venezuela, Nicolás Maduro, sostuvo este miércoles una conversación telefónica con el secretario general de la ONU, António Guterres, para alertar sobre lo que calificó como una «escalada de amenazas» por parte de Estados Unidos. Según el Palacio de Miraflores, Maduro denunció que las recientes acciones de la administración de Donald Trump tienen «graves implicaciones para la paz regional» y constituyen una violación a la soberanía del país sudamericano.
Durante la llamada, Maduro rechazó categóricamente las declaraciones de la Casa Blanca, tildándolas de tener un «abierto carácter colonial». El líder chavista solicitó que el sistema de Naciones Unidas fije una postura ante lo que considera un asedio político y económico que busca, mediante el uso de la fuerza, propiciar un cambio de régimen bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico.
BLOQUEO NAVAL Y REIVINDICACIÓN DE ACTIVOS
El conflicto escaló luego de que el presidente Donald Trump anunciara un «bloqueo total» a todos los buques petroleros sancionados que operen con Venezuela. Trump aseguró que el país se encuentra «rodeado» por la armada más grande jamás desplegada en Sudamérica y advirtió que la presión no cesará hasta que se devuelvan los activos que, según su visión, fueron «robados» a Estados Unidos.
A este discurso se sumó Stephen Miller, subjefe de gabinete de la Casa Blanca, quien afirmó que Estados Unidos «creó la industria petrolera de Venezuela» y calificó la nacionalización de 1976 como «el mayor robo» de la historia estadounidense. Estas palabras fueron usadas por Maduro para ejemplificar lo que denomina «diplomacia de la barbarie», asegurando que su gobierno defenderá la propiedad nacional de sus recursos naturales.
LLAMADO A LA DESESCALADA Y ACCIONES DEL COMANDO SUR
Por su parte, António Guterres reafirmó su compromiso con el derecho internacional y la Carta de la ONU, haciendo un llamado urgente a evitar cualquier confrontación armada que pudiese desestabilizar la zona de paz de América Latina y el Caribe. El secretario general informó que dará seguimiento a la situación a través del Consejo de Seguridad, privilegiando la vía del diálogo.
La tensión se ve reforzada por acciones concretas en el Mar Caribe:
Incautación de crudo: La semana pasada, el Comando Sur incautó el petrolero Skipper con crudo venezolano.
Operativo militar: Estados Unidos sostiene que ha atacado más de 30 lanchas ligadas al narcoterrorismo desde agosto.
Acusaciones: Trump sostiene que el petróleo venezolano financia el secuestro, el asesinato y el tráfico de personas. (NP-Gemini-Emol)





