El presidente de Rusia, Vladimir Putin, advirtió este domingo que la posible decisión de Estados Unidos de enviar misiles Tomahawk a Ucrania podría «arruinar» o, al menos, afectar la «tendencia positiva emergente» en las relaciones entre Moscú y Washington, según reportó la agencia Tass.
Las declaraciones de Putin se producen luego de que el vicepresidente de EE.UU., J.D. Vance, confirmara el domingo anterior que la administración de Donald Trump está evaluando la solicitud de Ucrania para obtener los misiles de largo alcance. Vance indicó que la decisión del presidente Trump se basará en «los mejores intereses de los Estados Unidos de América».
El líder ruso también hizo referencia a su reciente discurso en el Club de Discusión Valdái, donde advirtió sobre la «creciente militarización en Europa» y que la respuesta de Rusia a tales amenazas «será muy significativa». Putin concluyó que la reacción a esta situación «depende de mis homólogos (líderes occidentales)», asegurando ser «sincero en mis discursos».
La preocupación de Rusia se centra en el alcance de los proyectiles Tomahawk, que pueden alcanzar objetivos a unos 2.400 kilómetros de distancia. Esta capacidad es notablemente superior a la del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) —que EE.UU. ya permite utilizar a Ucrania— y podría aumentar significativamente las posibilidades de que Ucrania lance ataques profundos al interior de territorio ruso, considerando que la distancia entre Kiev y Moscú es de aproximadamente 750 kilómetros.
RUSIA CONDENA ATAQUE A BARCAZA VENEZOLANA
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, sostuvo una conversación telefónica con su homólogo venezolano, Yván Gil, en la que expresó la condena de Moscú por el reciente ataque de la Armada estadounidense contra una embarcación supuestamente vinculada al narcotráfico en el mar Caribe.
Según un comunicado del Ministerio de Exteriores ruso, Lavrov condenó «contundentemente el último ataque estadounidense del 3 de octubre contra una embarcación en aguas internacionales cercanas a Venezuela». Además, manifestó preocupación por la posibilidad de que una reciente resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la fuerza internacional en ese país se use para justificar ataques a la «criminalidad de las drogas» de Venezuela.
Rusia reafirmó su apoyo al gobierno de Nicolás Maduro y destacó la cooperación bilateral en organismos internacionales, como las Naciones Unidas, con el fin de asegurar el pleno respeto a la «soberanía de los Estados y la no injerencia en los asuntos internos». Por su parte, el ministro venezolano, Yván Gil, agradeció la «plena expresión de apoyo y solidaridad» de Rusia, señalando que el Gobierno ruso está comprometido con la preservación de América Latina y el Caribe como una Zona de Paz, frente a las «reiteradas amenazas de sectores políticos de Estados Unidos». (NP-Gemini-La Tercera)
