Horas antes de que se concrete la primera fase del acuerdo de paz con Hamás, que incluye un alto al fuego y un intercambio de prisioneros y rehenes, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió a la nación que «la lucha no ha terminado».
La primera etapa del acuerdo, que entra en vigor este lunes, contempla la liberación de 48 rehenes israelíes (de los cuales se estima que 20 están vivos) a cambio de la excarcelación de 250 presos palestinos, además de la retirada de las tropas israelíes en Gaza y un alto al fuego inmediato. Netanyahu calificó este escenario como un «acontecimiento histórico en el que se mezclan la tristeza por la liberación de los asesinos con la alegría por el regreso de los rehenes».
En un discurso a la nación, el premier israelí adoptó un tono cauteloso: «Todavía nos quedan por delante grandes retos en materia de seguridad. Algunos de nuestros enemigos están tratando recobrar fuerzas para atacarnos de nuevo». Subrayó que, a pesar de las «enormes victorias» logradas, «la lucha no ha terminado».
El conflicto a gran escala ha tenido un costo humano devastador, con al menos 67.806 muertes reportadas en Gaza, según el Ministerio de Salud local. La ONU ha respaldado en términos generales estas cifras y, a inicios de agosto, su secretario general, Antonio Guterres, confirmó que los gazatíes padecían hambruna. Un comité independiente del organismo multilateral también concluyó en septiembre que Israel cometió genocidio en Gaza, una calificación rechazada por Tel Aviv y Estados Unidos.
En Israel, 1.139 personas fallecieron en el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, en el que 251 personas fueron capturadas como rehenes. De ellos, 146 han sido liberados y 58 cuerpos repatriados. A estas cifras se suman 891 soldados israelíes muertos en servicio desde el inicio de la guerra.
IRÁN SE RESTA A REUNIÓN EN EGIPTO
A horas de la aplicación de la primera fase del acuerdo de paz entre Israel y Hamás, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, emitió un enérgico pronunciamiento sobre la crisis en Gaza, confirmando que no asistirá a la cumbre prevista para este lunes en Sharm el Sheij, Egipto.
Araghchi, a través de su cuenta de X, agradeció la invitación del presidente egipcio Abdel Fattah el-Sisi, pero declinó la asistencia señalando que ni el presidente Masoud Pezeshkian ni él pueden dialogar con «gobiernos que han atacado al pueblo iraní y continúan amenazándonos y sancionándonos».
Pese a su negativa a participar en la cumbre, el canciller iraní aseguró que su país respaldará cualquier iniciativa que ponga fin al «genocidio en Gaza» y que expulse a las fuerzas de ocupación israelíes. Araghchi defendió el derecho de los palestinos a la «autodeterminación» y afirmó que todos los Estados tienen la obligación de asistir a su causa legítima.
La declaración, difundida por la cancillería, sitúa a Irán como una «fuerza vital por la paz en la región», contrastando su postura con la de Israel, al que calificó como «genocida» y acusó de buscar «guerras eternas».
El mensaje iraní se produce mientras Egipto, Qatar y Naciones Unidas ultiman los detalles para el intercambio humanitario de este lunes, que contempla un alto al fuego, la liberación de 250 prisioneros palestinos a cambio de 48 rehenes israelíes (20 vivos), y la retirada gradual de las tropas de Gaza. El pacto representa el avance más significativo desde el inicio de la guerra en octubre de 2023, que ha dejado más de 67.800 muertos en Gaza y una crisis de hambruna confirmada por la ONU. (NP-Gemini-La Tercera Agencias)